Entiendo el sentimiento de Draito. Lo que realmente me gusta (y es una opinión personal) es el diseño del juego más allá de la historia (aunque confieso que la historia estuvo muy buena de principio a fin) pero es secundario cuando comparas el diseño del juego que, a pesar de su sencillez, es fascinante. Realmente te hace sentir que estás dentro de un rol (y sin la necesidad de reunir cinco personas con horarios diferentes para poder jugar un rol de mesa) Lo más interesante de todo es que la estructura del juego es como una mesa de rol pero en modo solitario y eso tiene un gran potencial. Explotarlo como si fuera petróleo sería tan sencillo como crear el mismo diseño del juego, quizás con otro tipo de clase como podría ser: Bardo, Monje, Inquisidor, Artífice en otro universo e historia, pero de igual modo entiendo al creador y quizás este es su pensamiento: ¿Para qué arruinar un juego tan bueno como el que ya está hecho? Si le meto más cosas podría arruinarlo. Es el típico pensamiento autodestructivo y saboteador o quizás simplemente le aburre esta sencillez y quiere la grandeza, pero la grandeza ya está en sus manos, solo que no la explota. A veces me pregunto: ¿Cuándo la va a explotar? En fin, quizás sobre pienso muchas cosas y nada de lo que he dicho se refleja en la realidad.